Tomás López: «En Salvament da igual el puesto o cargo que ocupes, todos somos una familia»


Tomás López, coordinador de Salvament Aquàtic

Tomás López es uno de los coordinadores de Salvament Aquàtic. Una buena forma de conocerlo un poquito más es a través de la siguiente entrevista.

¿Quién es Tomás López?
Un ciudadano más, con una profesión como muchas otras .

¿En qué consiste el trabajo que desempeñas en Salvament Aquàtic durante la temporada estival?


Consiste en la seguridad de las instalaciones acuáticas y los espacios acuáticos naturales, así como coordinar los recursos materiales y humanos de la empresa.

¿Y en invierno?


En invierno intento seguir formándome ya que en nuestro trabajo es importante estar reciclándose continuamente y seguir aprendiendo día a día.


¿Es importante la formación de los socorristas?


Muy importante, una formación de calidad, hará que ese profesional que se está formando entienda que lo tiene entre sus manos es la maravillosa labor de poder ayudar a la gente y salvar vidas.

¿Qué diferencia a Salvament Aquàtic del resto de empresas?


En Salvament Aquàtic todo el mundo forma parte del equipo. Da igual la función o el puesto que se ocupe. Se respira calidad humana y te hacen sentir parte de su familia y es lo más importante a la hora de sentirse a gusto.

¿Cuánto te iniciaste en el mundo del socorrismo? ¿Por qué lo hiciste? 


Con 16 años. En su momento era una manera de tener unos ingresos extras en verano, pero el tiempo me hizo ver que me gustaba ayudar a la gente.

¿Has salvado muchas vidas a lo largo de los años?


Siendo honesto y con el corazón en la mano te diré que no he salvado ninguna, he ayudado a mantenerse a las personas con demasiadas RCP por desgracia, y en otras ocasiones ha sido imposible ayudarles a mantenerse.
Para mi quien realmente salva sus vidas son los profesionales que se los llevan al hospital y consiguen estabilizarlos y sacarlos hacia delante.

¿Cuál ha sido la situación más complicada durante tu carrera profesional en el mundo del socorrismo?


Mi situación más complicada quizás es cuando ves que lo estás dando todo por mantener a esa persona y no consigues hacerlo y sobretodo porque esa persona tiene una familia que tiene los ojos y las esperanzas puestas en ti.
Ese día es duro y sientes que les has fallado a ellos y a ti mismo.

¿Consideras qué la sociedad no valora lo suficiente el trabajo que realizan los socorristas?


Considero que somos un sector muy castigado en un país que vive del turismo y tenemos tanta costa y tantas instalaciones acuáticas.
Quizás la gente nos ve como esa figura que les corta el rollo cuando están en sus vacaciones y se pueden desinhibir, pero lo hacemos por prevención y seguridad.

¿Es complicada la seguridad acuática de un parque en relación a la de una playa o piscina?


No te diría complicada, es diferente. Me explico, en un entorno como la playa el repentino cambio climatológico te dibuja un escenario totalmente distinto al que tenías instantes antes y por requiere una reacción rápida que siempre esperas sea la mejor.


En un parque tienes los riesgos localizados y cuentas con un plan de auto protección que hace que si pasara algo en algún hidrotubo tengas ya protocolos preparados. También contamos con un plan para cambios climatológicos porque no hay que olvidar que en los parques acuáticos contamos con estructuras metálicas y estamos rodeados de mucha agua.
En un hotel, quizás sea la figura que menos se valora y la que más resolución debe tener ya que el socorrista se encuentra solo y no rodeado de un equipo como pasaba en playas y parques.

Una anécdota simpática

Cuando comencé en la playa con 16 años cada mañana ayudaba a un grupo de viejecitos para entrar y salir del agua ya que creo que estamos para ayudar. Y un día sin esperarlo me prepararon un merienda con cocas de trampó, empanadas, cocarrois y algunos dulces…., y no sé si quizás sea la más simpática pero si te diré que fue la que más me hizo más ilusión porque lo hicieron todo casero y de corazón. Quizás sea una de las causas que hoy en día me hacen ser quien soy y haber llegado donde estoy.